La actual EDAR (estación depuradora de aguas residuales) de Vila-Seca y Salou está diseñada para dar servicio a una población de 193.000 habitantes equivalentes, con un caudal de 47.500 m3/día.
De acuerdo con los crecimientos urbanísticos previstos en la zona y al aumento de las demandas de agua tratada de mayor calidad, se ha hecho necesario ampliar la planta, elevando la capacidad de tratamiento de la misma hasta los 60.500 m3/día, con un caudal de 15.000 m3/día libre de nutrientes para el tratamiento terciario, dando servicio a una población de cerca de 316.000 habitantes equivalentes.
Las aguas residuales llegan a la planta actual impulsadas a través de seis estaciones de bombeo.