La línea 9 será la línea de metro más larga de toda Europa, con 48 km de recorrido y 52 estaciones, atravesando la ciudad de Barcelona y dotando de una magnífica conexión a los barrios con más demanda de transporte público de la ciudad.
Esta línea conectará además con las zonas de actividades logísticas del puerto y con el aeropuerto.
La ejecución de los túneles ferroviarios se realizó mayoritariamente con máquinas tuneladoras del tipo EPB (Earth Pressure Balance) con diámetros de 9 ó 12 m en función de si los tramos admiten circulación de trenes a simple o doble altura. La red de túneles se vio completada con tramos ejecutados mediante túneles de pantallas y con métodos convencionales de excavación.
Cabe destacar el ramal ubicado en la Zona Franca, comprendiendo 2.700 m de línea en viaducto y 4 estaciones superficiales, dada la imposibilidad de perforar en esa zona industrial vecina al mar.
El método escogido para la construcción de las estaciones fue la ejecución de pozos cilíndricos de 28 m de diámetro y profundidades de hasta 70 m.
El desarrollo de los andenes presenta la superposición de dos niveles ubicados ambos en el interior del túnel, pasando de la tradicional línea de metro con trenes a un mismo nivel, a dos niveles independientes separados por una losa estructural.
Las particularidades del territorio obligaron a que en menor número las estaciones subterráneas fueran ejecutadas con el método convencional de recintos apantallados.
