Esta iniciativa de carácter internacional, persigue la implantación de los principios básicos de conducta en materia de responsabilidad social de las empresas. El Pacto lleva a la práctica el compromiso de sincronizar la actividad y las necesidades de las empresas con los Principios y objetivos de la acción política e institucional de Naciones Unidas, de las organizaciones laborales y de la propia sociedad civil.